Es la primera que se permite habitar

Así es la primera casa impresa en 3D en Europa: 94 m² y dos habitaciones

La empresa holandesa Saint-Gobain Weber Beamix ha instalado la primera vivienda impresa completamente en 3D del proyecto Milestone. Dos jubilados son sus habitantes. 

La primera casa impresa en 3D en Europa.
La primera casa impresa en 3D en Europa.
Saint Gobain-Weber Beamix.

Hito en sector inmobiliario. La primera casa europea impresa totalmente en 3D es un éxito y sus dueños ya la habitan. Esta innovación de la empresa holandesa Saint-Gobain Weber Beamix abre un horizante de nuevas posibilidades para la vivienda.

Inspirada por la forma de una roca, la silueta de esta vivienda sería muy difícil y muy cara de construir siguiendo los métodos tradicionales. El proyecto Milestone consta de cinco viviendas iguales que se instalarán en el canal de Beatrix de la ciudad de Eindhoven.

Se trata de una casa amplia de 94 metros cuadrados y ostenta el título de ser la primera vivienda impresa en 3D habitable legalmente. Hasta la fecha, varias empresas francesas y americanas habían construido viviendas impresas parcialmente en 3D, pero en ningún caso al completo. "Es la primera vivienda en 3D que las autoridades permiten habitar", explica Bas Huysmans, Jefe Ejecutivo de Weber Benelux, en declaraciones al diario 'The Guardian'.

El método de impresión 3D implica un enorme brazo robótico con una boquilla que genera un cemento con una textura cremosa. Ese cemento adquiere la forma previa diseñada por un arquitecto y suma varias capas hasta crear un muro fuerte.

En el caso de esta vivienda, 24 elementos de hormigón fueron impresos capa a capa en una fábrica de Eindohven antes de ser transportados en camión al lugar de construcción. Una vez construida la vivienda, se le añadieron el tejado y las ventanas. Las piezas se imprimieron en solo 120 horas. 

La puerta se abre con una app

Elize Lutz (70 años) y Harrie Dekkers (67) forman la pareja de jubilados que ya vive en régimen de alquiler en este novedoso inmueble.Vieron el anuncio por internet y se enamoraron de la apariencia de la casa. Ahora pagan 800 euros al mes y disfrutan de sus comodidades. "Es preciosa. Parece un búnker. Me siento segura en ella", explica Dekkers al mismo diario.

Entre sus curiosidades destaca la forma de abrir la puerta. La casa tiene una llave digital y la pareja desbloquea la puerta a través de una app. Sus estancias se distribuyen en un amplio salón-cocina-comedor, una habitación de matrimonio, una habitación individual y baño.

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