Buscar empleo, ya sea por primera vez o no, suele ser un ejercicio tedioso. Pero aún más quebraderos de cabeza suele ser dar el primer paso: la elaboración del currículum vitae. La preparación de este documento, que recoge los datos personales y la experiencia laboral de los aspirantes, suele ocasionarnos dudas al tener que reducir a la mínima expresión mucha información.
El currículum, por tanto, se trata de la primera carta de presentación de cara a una empresa que busca empleados. Es por eso que debe ser lo más atractivo y concreto posible para conseguir el siguiente objetivo: la entrevista personal. Es útil para que los captadores se hagan una primera impresión y es importante cuidar la imagen y el contenido del mismo con los siguientes trucos, recomendados en la página psicología y mente por su director, experto en Psicología de las organizaciones.
1. Elegir el tipo de currículum
Existen distintos tipos y debemos identificar el que mejor nos venga según cuál sea el objetivo y nuestra experiencia laboral. Los más habituales son: cronológico, funcional y mixto. El más frecuente de ellos es el cronológico siempre y cuando tu trayectoria profesional ininterrumpida en el tiempo.
Suele ser buena idea el orden cronológico de forma inversa, situando las últimas experiencias al principio. Más que nada porque las últimas experiencias suelen ser más relevantes y así tendrán una mayor visibilidad.
2. Conoce la empresa y el puesto
De manera habitual, se suele usar la misma plantilla de currículum para optar a puestos de trabajo diversos. Según este experto, se trata de un error. Es importante que la información quede clara y los puntos fuertes estén remarcados, pero de la misma manera es imprescindible adaptarse al puesto. Por ejemplo, no puede darse el mismo peso a lo visual (plantilla) de un diseñador gráfico que de un director de Recursos Humanos.
3. Estructura clara
La estructura debe facilitar el trabajo a la persona encargada de seleccionar al personal dentro de la empresa. De la misma manera, es importante que este incluya de manera ordenada los datos personales, formación académica, experiencia profesional (si hay trabajos irrelevantes para el puesto, pon solo aquellos que consideres que son competencias necesarias en esta convocatoria), idiomas, informática y otros datos de interés.
4. Uso de espacios en blanco
Según este experto, es necesario dejar espacios en blanco para atraer la atención del reclutador en aquellos puntos que son importantes de tu perfil. Es una forma de facilitarle el trabajo, lo que puede beneficiarte a ti también.
5. Solo incluir información relevante
Este punto ya se ha mencionado, pero es necesario resaltarlo. Puede ocurrir que uno desee poner toda su experiencia profesional si se han tenido muchos trabajos. Pero el reclutador solamente desea saber sobre la información relevante. Por ejemplo, si tu hobbie no tiene que ver con el trabajo que quieres realizar, evita poner las aficiones.
6. No incluyas referencias
No es necesario que incluyas las referencias de otros superiores. Es una información que puede obviarse y no es necesario facilitar si no te lo hacen saber.
7. Evita incluir los hobbies
Este dato no aporta mucho a la candidatura. A no ser que apliques a una tienda de deporte y sea importante haber practicado alguno, son datos que puede obviarse.
8. Carta de presentación
Un punto extra es escribir una carta de presentación. En ella podemos poner en valor datos diferentes a los aportados en el currículum para defender nuestra candidatura. No se recomienda repetir lo que ya está recogido dentro del CV.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios