Siempre hay buenas razones para que la mayoría de la gente no se compre un coche nuevo. Tal compra puede aplazarse durante años, ya que los altos pagos mensuales retrasan la acumulación de ahorros e inversiones que se necesitarán más adelante. Tras dos ejercicios completos de escasez, lotes vacíos de vehículos nuevos y precios altos, cabría esperar que 2023 sea el año en el que los concesionarios se vuelvan generosos. Pero parece que no será así.
“Prevemos un mercado para los automóviles desafiante a nivel mundial en el conjunto del 2023, impulsado por los altos tipos de interés, los precios de la energía y las tasas de financiación, que afectan la asequibilidad”, escribieron los analistas Mizuho Americas, dirigidos por Vijay Rakesh, en un reciente informe. La analista de Cox Automotive, Michelle Krebs, explica que los inventarios de vehículos han aumentado, pero que Toyota y Honda todavía tienen un bajo número de coches nuevos a la venta. Una de las razones de los altos precios es que “los fabricantes de automóviles están construyendo vehículos más caros porque el comprador de coches nuevos tiende a ser más rico”, apunta.
“Si bien la situación del inventario ha mejorado modestamente en el cuarto trimestre, la oferta permanece muy por debajo del nivel en el que se puede satisfacer la demanda de los consumidores de vehículos nuevos”, asegura Thomas King, presidente de la división de datos y análisis de JD Power. “Los precios de transacción de vehículos nuevos continúan aumentando, aunque a un ritmo más lento que a principios de este año. El precio promedio en diciembre marcó un récord de 46.382 dólares en Estados Unidos, lo cual representa un incremento del 2,5% respecto al año anterior”, agrega.
El índice de asequibilidad de vehículos de Cox Automotive/Moody's Analytics alcanzó un nuevo mínimo en noviembre, con una media de 43,3 semanas de ingresos necesarios para pagar la compra de un nuevo vehículo ligero. Los tipos de interés más elevados también están expulsando del mercado a algunos prestatarios con calificaciones crediticias más bajas, según Krebs.
Desde una perspectiva más amplia, Burt Hurvich, vicepresidente de Mount & Nadler, dice que debido a la mejora en la calidad y la durabilidad “comprar un coche nuevo, incluso en las marcas de alta gama” es una mala idea para cualquiera. Sugiere adquirir un automóvil de segunda mano de un concesionario afiliado directamente al fabricante. Cita ejemplos en los que él o miembros de su familia compraron vehículos que tenían dos años con poco rodaje, ahorrándose “más del 50% del precio original del coche nuevo”.
Llevando esta idea más allá, Hurvich enfatiza la importancia de las relaciones humanas, si se desea mantener bajos los costes de mantenimiento y reparación. “Lo más probable es que vayas al concesionario para recibir inputs de vehículos más modernos, porque la creciente complejidad hace que sea más difícil para los mecánicos individuales pagar el equipo de diagnóstico”, comenta. “Para mantener bajos los costos de reparación, la clave es desarrollar una buena relación con el personal de servicio del distribuidor… Entonces harán más por ti que por otra persona”, dice.
Un año para dejarlo pasar
Krebs concreta que, en el mercado de automóviles actual, es posible que tengamos dificultades para encontrar un coche usado de último modelo a un precio atractivo. Todo esto se reduce a la necesidad de esperar para comprar el próximo coche de segunda mano, si es posible, porque el mercado de automóviles puede tardar otro año en asentarse. Puede costar mucho menos mantener o reparar el coche nuevo por un par de años más.
“Si tienes que comprar un coche, debes ampliar tu análisis”, dice Kebs, quien recomienda ser flexibles en cuanto a marcas y vehículos. Tal y como expone los compradores que habían insistido en los SUV han vuelto a mirar otras opciones, en parte, debido a los precios más altos de la gasolina. Eso ha resultado complicado porque Ford, General Motors y Chrysler se han alejado de los modelos SUV en favor de las pick up en Estados Unidos. Todo esto se reduce a otro año difícil para los compradores de automóviles. “¿Puedes esperar? ¿Funciona bien tu coche viejo? ¿Realmente necesitas hacer este gran movimiento financiero en 2023? Esperar otro año puede ayudarte a ahorrar un pago inicial más grande para tu próximo coche, lo que facilita las compras en lo que puede ser un mercado muy mejorado en 2024”, termina Krebs.
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