Según Bank of America

6G, minería verde... tecnología 'radical' que alcanzará los 5,5 billones en 2030

El ritmo de transformación sigue acelerándose y sistemas que ahora vemos lejanos se hacen cada vez más actuales, con un potencial a corto plazo e "impacto disruptivo" en la sociedad.

El futuro ya está aquí con las ciudades conectadas a la red 5G.
6G, minería verde... tecnología 'radical' que alcanzará los 5,5 billones en 2030
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Las grandes tecnológicas marcaron un hito en el mercado hace ya más de una década y ahora copan la parte alta de las empresas de mayor capitalización por su elevado valor. Ahora la tecnología sigue su curso y su 'acelerón' anticipa nuevas tendencias en el sector que, aunque parezcan todavía irreales, alcanzarán los 6,4 billones de dólares (5,5 billones de euros) en la década de 2030.  Baterías de nueva generación, tecnología 6G, minería verde... Un informe de Bank of America destaca hasta 14 tecnologías que van a ser protagonistas del mercado más pronto que tarde. "Moonshots son tecnologías radicales que podrían cambiar nuestras vidas y acelerar el impacto de las megatendencias globales", subrayan. Y añaden que "no identificar la tecnología del futuro hoy podría significar perderse la próxima gran revolución". 

Según su análisis, los inversores siguen subestimando la aceleración de nuevas tecnologías, "sin evaluar con precisión el potencial a corto plazo y su impacto disruptivo en la sociedad". Las industrias que destaca el banco de inversión representan un tamaño de mercado de 330.000 millones de dólares en la actualidad, pero avisan que su valor se multiplicará por 20 en la próxima década. Pese a este pronóstico, los analistas advierten que su crecimiento se puede detener por diversos riesgos que afectan a la industria . Entre todos, destacan un "desarrollo tecnológico lento o limitado", que impediría su aplicación en la industria. Además, indican que si los costes son "prohibitivos", superando el beneficio, o la regulación limita la aplicación de la tecnología, la apuesta por la nueva tecnología también decaerá. 

Tecnología computacional

La sexta generación de conectividad móvil (6G), al igual que ocurrió con las anteriores, marcará los movimientos geopolíticos, con países como China o Corea del Sur ya preparando su despliegue. Las nuevas redes de telecomunicaciones serán necesarias en menos de una década ya que los datos siguen creciendo exponencialmente y el 5G alcanza su capacidad límite. "A las velocidades móviles actuales, tomaría alrededor de 181 millones de años descargar todos los datos de Internet -recoge el informe. Eso se reduce a 838.000 años en 5G y solo a 17.000 años en 6G".

Cuando los humanos alcancemos el ritmo de los ordenadores, la inteligencia artificial actuará como una pieza clave y las interfaces cerebro-ordenador podrían ayudar a "nivelar" a los humanos con los ordenadores. Las conexiones cerebro-ordenador ofrecen soluciones para personas con problemas y prometen una nueva ola de innovación en los juegos. Además, en este sector también irrumpirá la Inteligencia Artificial Emocional, diseñada para "capturar, analizar y responder a las emociones humanas y simular los pensamientos humanos".

​'Human tech'

Otro de los campos con potencial es la tecnología vinculada a las capacidades de los seres humanos. En 2013 el mundo vio al primer hombre biónico que caminaba y hablaba con extremidades artificiales e, incluso, con un corazón latiendo. Además, BofA señaló la inmortalidad como una inversión que podría dominar la próxima década. Las empresas antienvejecimiento se han visto impulsadas por la decisión de la Organización Mundial de la Salud de clasificar el envejecimiento como una enfermedad en 2018.

Por su parte, la biología sintética es un campo de la ciencia que combina características de la biología molecular, la genómica, la química, la ingeniería, el aprendizaje automático y la informática. En esencia, la "synbio", como se denomina comúnmente este campo, aprovecha la gran diversidad de la naturaleza para fabricar biomoléculas que la química tradicional no puede. "Para 2030, los científicos creen que la mayoría de la gente habrá comido, usado, usado o sido tratado por algo creado a través de la biología sintética" y los analistas estiman que el mercado tiene un valor de más de 1 billón de dólares.

Tecnología de consumo

La industria del consumo acogerá tendencias futuristas. Entre otros, vehículos eléctricos de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) como alternativa a las infraestructuras demasiado saturadas. Estos coches voladores no están lejos de ser una realidad, ya que se espera que los aviones de 3 pasajeros tengan autorización para su lanzamiento comercial en 2023. Los inversores también deben prestar atención al desarrollo de la electricidad inalámbrica, es decir, dispositivos de carga sin el uso de cables. Este desarrollo proporcionará comodidad a los consumidores, pero también será clave para el desarrollo de otros dispositivos.

Además, el sector busca la instantaneidad y los videollamadas quedarán anticuadas cuando los hologramas se conviertan en una realidad para el público común. Ya son posibles, y de hecho, el grupo ABBA planea un gira para lanzar su primer álbum en 40 años, pero para que llegue al ciudadano medio es necesaria la tecnología 6G. En este sentido, el metaverso también irrumpirá para "comprender innumerables mundos virtuales persistentes que interoperen entre sí". Según los pronósticos, para la década de 2030, la realidad virtual será totalmente realista y convincente, lo que significa que pasaremos más tiempo en el mundo virtual que en el mundo real.

Tecnología verde

En pleno 'boom' verde de la inversión, las tecnologías disruptivas no se quedan al margen de esta tendencia. "La captura y almacenamiento de carbono (CAC), las baterías de nueva generación y la minería verde podrían ser la solución para reducir las emisiones en un 70% y permitir el acceso a tres veces más metales de tierras raras". Estas tecnologías ofrecen oportunidades de inversión, ya que, según calcula el informe, solo industria de la CAC podría alcanzar un valor de 1 billón de dólares para 2040. 

Las baterías de nueva generación se verán impulsadas por vehículos eléctricos de carga más rápida, desarrollados por compañías como Tesla. BofA destaca que aunque las baterías de litio son la principal tecnología de los vehículos eléctricos, esto no tiene por qué seguir siendo así, ya que otras alternativas, como las de estado sólido, flujo de vanadio, iones de sodio..., ofrecen características adicionales prometedoras, como una carga más rápida, mayores densidades de energía y una mejor reutilización.

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