Así se han modernizado las infraestructuras 'made in Spain' en los últimos 70 años

Recorrido por las obras nacionales innovadoras, eficientes y sostenibles que han marcado la evolución de este ámbito en nuestro país y en el extranjero.

OFRECIDO POR FERROVIAL

La sociedad y el entorno que nos rodea han cambiado notablemente durante los últimos 70 años. Aunque la transformación ha sido progresiva, si echamos la vista atrás las variaciones han sido profundas. Ejemplo de ello son las infraestructuras.

Las primeras calzadas se remontan a los tiempos del Imperio Romano, cuando los seres humanos comenzaron a preocuparse por construir y mejorar las vías de transporte terrestre. Entonces, solo se despejaron los caminos de vegetación, lo que resultó insuficiente para transitar con carros pesados.

La primera red nacional de carreteras de España, como informa la Dirección General de Tráfico (DGT), data de la época de Carlos III (siglo XVIII) y fue construida con capas de rodadura de piedra machacada y aglomerada con un segundo material que le daba consistencia. Algo que, sin embargo, no facilitó el deslizamiento de los neumáticos cuando apareció el automóvil.

El problema se solucionó incorporando el alquitrán y el betún al pavimento y rellenando con asfalto todos los huecos que aún quedaban. La siguiente revolución vino de la mano de la Segunda Guerra Mundial, cuando se añadió hormigón para que los tanques y otros vehículos militares cargados de artillería pesada se moviesen con facilidad.

Y en esta historia de grandes obras, Ferrovial desempeña un papel fundamental. El operador global de infraestructuras, que cumple este año su 70 aniversario, cuenta con una gran experiencia en la gestión de este sector y en el desarrollo de nuevas soluciones innovadoras, eficientes y sostenibles.

Grandes obras de Ferrovial

Rafael del Pino y Moreno fue su fundador, que creó esta compañía en 1952 desde un ático del centro de Madrid. El primer proyecto fue la adjudicación de un contrato con Renfe que, gracias al buen trabajo realizado, volvió a contar con la empresa más tarde (1958) para ejecutar uno de los tramos de los Enlaces Ferroviarios de Madrid, el trayecto Las Rozas-Chamartín.

De hecho, este proyecto figura como uno de sus grandes hitos. Ferrovial tuvo que construir en apenas un verano 29 kilómetros. Un desafío que hoy se conoce en la propia compañía como '30 kilómetros en 30 días'. Un éxito que atribuyen a la innovación en la organización del trabajo y a la importación de maquinaria hasta entonces desconocida en España, que permitió aumentar la productividad, reducir costes y aumentar la calidad.

Llegaron los años 60 con la entrada de nuevos negocios. Esta vez, también relacionados con obras hidráulicas, carreteras y edificaciones. Entre ellos, destaca el Plan Redia, orientado a mejorar los itinerarios con mayor densidad de tráfico del país, así como los accesos y circunvalaciones de las ciudades más importantes. Además, se construyeron las autopistas de Bilbao-Behobia y Burgos-Armiñón, consideradas como "el salto cualitativo y cuantitativo en la historia de Ferrovial".

A finales de la década de los 70, marcada por la crisis del petróleo, Ferrovial se lanzó al mercado extranjero y llevó a cabo la construcción de 700 kilómetros de carreteras en Libia y así nació su división internacional, expandiéndose también por México, Brasil y Paraguay.

Con la entrada de España en la Unión Europea en 1986, Ferrovial se convierte en un actor esencial tanto en la construcción de la red de autovías y los accesos a grandes ciudades, como en la ampliación y modernización de puertos, aeropuertos, ferrocarriles y en la creación de nuevos hospitales y colegios.

Esta etapa podría llegar a considerarse la época dorada de la compañía porque también se le adjudicaron diversos tramos del tren de Alta Velocidad Madrid-Sevilla, así como numerosas obras de infraestructuras para los Juegos Olímpicos de Barcelona y la Exposición Universal de Sevilla de 1992.

El Museo Guggenheim de Bilbao, entre 1993 y 1997, despunta como una de sus construcciones más emblemáticas. Esta obra, símbolo de la modernidad de la capital vizcaína, ocupa una superficie total de 24.000 metros cuadrados y se ejecutaron, entre otras actividades, las obras de hormigón, estructura metálica, revestimientos interiores, instalaciones y urbanización.

En 1994, adquirió la constructora Agroman. Una operación con la que Ferrovial dobló su tamaño y se posicionó como una de las más importantes empresas del sector en España. De hecho, se acreditó en poco tiempo con una división específica: Ferrovial Inmobiliaria.

No obstante, la operación que marcaría su futuro sería la autopista canadiense 407 ETR, ya que supuso la mayor privatización de la historia del país y la mayor adquisición en concesiones liderada por un grupo español en el extranjero. Además, constituye la primera experiencia en el mundo de un sistema de peaje totalmente electrónico.

Salida a Bolsa y liderazgo en el extranjero

Otro de los saltos cualitativos más importantes de la compañía fue, en 1999, su salida a Bolsa. Este paso de negocio familiar a empresa cotizada conformó la Ferrovial que conocemos hoy, pues le permitió contar con los recursos necesarios para emprender la estrategia de diversificación que se produciría en los años posteriores.

Un año más tarde, ya en el inicio del siglo XXI, se produce un relevo en la cúpula: el fundador se retira y su hijo Rafael del Pino Calvo-Sotelo asume la presidencia. Una etapa que vino acompañada por la diversificación de las concesiones aeroportuarias, así como por su crecimiento y consolidación a nivel internacional, llegando a estar presente en Australia. 

Para poner casos concretos, en los primeros diez años, se suceden distintos acontecimientos, como la compra de la constructora estadounidense Webber o la aprobación de la integración de Cintra en 2009, logrando con esta fusión posicionarse como una empresa líder en la gestión de infraestructuras de transporte y servicios. Una operación que facilitó una expansión por más de 40 países de todo el mundo.

En el mismo período, también tuvieron lugar algunas de las adjudicaciones más importantes de Ferrovial, como las Managed Lanes ubicadas en Texas, Carolina del Norte y Virginia del Norte. Con estas y otras operaciones, Ferrovial consigue en 2016 afianzarse en el mercado de los Estados Unidos, al situarse como uno de los mayores inversores españoles en este país y el mayor en el sector de las infraestructuras de transporte.

Ya en 2022, fruto de la apuesta del operador por explorar oportunidades de inversión en Asia, Ferrovial entra en el mercado de la India y Turquía con planes de desarrollo de infraestructuras de la región, donde cada vez está más presente el modelo de colaboración público-privada. 

Proyectos futuros de Ferrovial

La innovación es una piedra angular en la estrategia de la empresa española. En su apuesta por liderar la movilidad del futuro, Ferrovial trabaja en el despliegue de redes de vertipuertos en distintas partes del mundo, entre las que se encuentran los Estados Unidos y el Reino Unido.

Entre sus próximos proyectos, destaca el conocido como New Terminal One del Aeropuerto JFK en Nueva York. Con una inversión de 9.500 millones de dólares (más de 8.600 millones de euros), la construcción comprende las terminales T1, T2 y la antigua T3, con el objetivo de fijar un nuevo estándar mundial en el diseño y servicios y convirtiéndose la misma en la mayor terminal internacional de este aeródromo.

Asimismo, la compañía ha puesto en marcha (junto con Renault) el servicio de carsharing eléctrico Zity en grandes ciudades y capitales como Madrid, Parías, Lyon y Milán, y espera seguir ampliando el negocio en los años venideros.

Proyecto 'New Terminal One' del Aeropuerto JFK en Nueva York.
Proyecto 'New Terminal One' del Aeropuerto JFK en Nueva York.
CEDIDA

Actualmente, Ferrovial cuenta con una plantilla de 20.000 trabajadores y registra unas ventas superiores a los 6.700 millones de euros. Su actividad está centrada en EEUU, Canadá, Reino Unido, España y Polonia, donde tiene una capitalización total de 20.218 millones de euros. Además, busca extenderse en otros mercados, como Australia, Chile, Colombia y Perú.

Compromiso con la sostenibilidad y la descarbonización

Comprometido con el desarrollo de soluciones sostenibles, la empresa está constantemente trabajando en el desarrollo de nuevos modelos de negocios que contribuyan a reducir el impacto del ser humano en el medioambiente y a la descarbonización en la economía.

Prueba de ello es su inclusión en algunos de los índices más prestigiosos, como en el S&P Global (antiguo Dow Jones Sustainablity Index) desde hace más de 20 años de manera ininterrumpida o en AENOR, que ha reconocido se Estrategia de Sostenibilidad 2030 como la primera del sector en España certificada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

La apuesta por la sostenibilidad se traduce en el diseño de una hoja de ruta gradual para la descarbonización

Convertida en un referente en este ámbito, ha creado recientemente la unidad Infraestructuras Energéticas y Movilidad, que tiene como fin desarrollar actividades relacionadas con la energía renovable, la movilidad sostenible y la economía circular. En esta línea, sobresale el Plan Horizon 24, una estrategia para el período 2020-2024 que sitúa el foco prioritario de la compañía en la promoción, construcción y gestión de infraestructuras más ágiles, eficientes e innovadoras.

Por otro lado, también lleva a cabo distintas iniciativas a nivel social para garantizar la igualdad de oportunidades, así como de inversión para mejorar las condiciones de vida de más de 558.000 personas.

Logros que se han visto materializados en las acciones de la compañía, que ha multiplicado por diez su valor desde que salió a Bolsa. 

REALIZADO POR ALAYANS STUDIO
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