El Gobierno de España inicia una ofensiva diplomática para convencer a Bruselas de su nuevo papel en la estrategia energética del continente. Lo ha hecho a través del núcleo duro de Sánchez, que asume la iniciativa ante un presidente de viaje oficial por Sudamérica, continuando así con la hoja de ruta marcada para situar al país como el nuevo 'hub' del gas en Europa. Las duras perspectivas energéticas de Centroeuropa, que afronta un invierno bajo el embargo del gas procedente de Rusia, se han saldado con el apoyo directo del canciller alemán Olaf Scholz al gasoducto MidCat.
Tras varios días sin novedades respecto a la postura negativa de París, Sánchez ha activado el plan B: anunció su idea de construir un gasoducto bajo el mar Mediterráneo que conecte Barcelona y Livorno (Italia) y sustituya el puente marítimo de barcos metaneros que a día de hoy ya suministran gas licuado a Centroeuropa, ante la imposibilidad de subirlo por Francia. Las tensiones del mercado energético y la subida del precio del gas, que hoy ha llegado a un precio récord de 315 euros, han hecho que los precios de los metaneros se igualen con los del gas que llega por tubería, aumentando la competitividad de las regasificadoras españolas, que adquieren todavía más valor estratégico para España y Europa.
Primero fue la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, quien ésta mañana ha reincidido en su petición a Bruselas para que desbloquee la puesta en marcha del gasoducto MidCat entre España y Francia, que el país galo se muestra reacio a concluir. Ribera ha pedido una mayor implicación de las instituciones comunitarias y les ha recordado que la Península Ibérica está en una postura mucho más cómoda -en términos energéticos- que el resto de estados miembros, quienes han recurrido al principio de "solidaridad" para imponer el plan de ahorro energético.
Ribera ha renunciado a considerar las posiciones de España y Francia por el MidCat como "una disputa bilateral", y ha asegurado que "España no necesita exportar gas", insistiendo en que "si Europa quiere recibirlo, debe implicarse", en declaraciones a Antena 3. La Vicepresidenta Tercera lanza así un nuevo órdago a Bruselas para que invite a Francia a ceder en su negativa y concluya una infraestructura que ha adquirido un cariz estratégico para España, primera potencia europea en plantas de regasificación. En su discurso, insistió en poner en marcha el MidCat como solución a corto plazo: "es lo más sencillo y lo más limpio", señaló.
En la misma línea, la ministra aboga por ejecutar el gasoducto submarino entre Barcelona y Livorno para sustituir el tráfico marítimo de metaneros entre las plantas de regasificación situadas en ambas ciudades. "¿Podemos construir un gasoducto submarino que ahorre el gasto a medio y largo plazo? Es una opción que debemos valorar con mucha seriedad", ha apuntado. La apuesta de España pasa por que esta infraestructura se dedique a la transmisión de gas natural, pero a corto plazo traslade gas natural combinado con biogás, y en un futuro, hidrógeno verde.
Borrell en Bruselas, Bolaños en París y Ribera desde Madrid han puesto en valor la necesidad del MidCat para garantizar el suministro de gas del continente
Poco después, ha sido el Ministro de Presidencia, Félix Bolaños, quien ha defendido la importancia del MidCat en París, donde se encuentra de visita oficial por el 78 aniversario de la liberación de la capital gala de los nazis. Bolaños ha insistido en el mensaje lanzado por Ribera, recordado que España "no es el país más afectado por el chantaje energético" y afirmado que mantiene "una postura colaboradora" para garantizar el abastecimiento en toda Europa. En esta línea, ha sostenido que el gasoducto interpirenaico "es un proyecto estratégico para España, para Alemania, para Francia y en general para la UE".
El desencuentro, a día de hoy, sigue siendo principalmente económico, ya que ni los países ni Bruselas se quieren hacer cargo del coste de la obra, que fue cancelada antes de la pandemia y ha revivido ante la crisis energética europea. Hace unos días fue Josep Borrell, el alto representante de la UE para política exterior, quien reclamó la construcción de la obra, alegando que la Comisión Europea estaba precisamente, para dirigir la política comunitaria y conseguir el acuerdo de todas las partes.
Ribera activa el segundo plan de ahorro energético
La responsable de Transición Ecológica ha confirmado que el plan Moves seguirá activo y sus fondos serán renovados según se vayan agotando. También aboga por seguir las directrices europeas y fomentar el "pago por uso" en las autovías. Apagar la iluminación de éstas, como ya adelantó ayer La Información, está en estudio que se incorpore al segundo paquete de medidas, que incluirán "todas las medidas de ahorro y eficiencia que se puedan imponer mediante recomendaciones", que afectarán a municipios y hogares. Además, ampliará los fondos destinados a mejoras en eficiencia energética para industria y sector terciario, que se incorporará a las ayudas.
Ribera ha reiterado que su apuesta no incluye a la energía nuclear, un debate que se ha intensificado en los últimos días y que, a su juicio, responde "al interés de un lobby oportunista": "Creo que hay bastante demagogia, el fin de la nuclear se plantea para 2035, no sé qué tiene que ver con este invierno". En esta línea, aboga por "aprovechar nuestros recursos" y por "combinar renovables con almacenamiento para liderar esta tecnología", además de incentivar el uso de gases a mayor escala, como el biogás o el metano.
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