Renfe posterga la llegada de sus trenes AVE a París hasta la primavera de 2024

Renfe retrasa su plan para llegar a París. La operadora pública aplaza su proyecto para llevar sus trenes AVE hasta la capital francesa, que según anunció la ministra de Transportes española, Raquel Sánchez, iban a llegar en diciembre de 2023. La nueva fecha que ahora maneja la cúpula de la compañía es la primavera de 2024, sin concretar fecha exacta, de cara a que tanto los trenes como el personal adquieran el rodaje ante la verdadera prueba de fuego: los Juegos Olímpicos que se celebran en el país vecino en el verano de 2024. 

Según adelanta el diario francés 'Le Parisien', fuentes próximas al proceso administrativo necesario para que Renfe dejan para "primavera" la fecha en la que la compañía estatal española pueda poner sus trenes en la línea más rentable de Francia, la que une París con Lyon. Según la misma fuente, Renfe ya ha solicitado los surcos (derechos de paso) con el gestor de la infraestructura, SNCF Réseau para circular entre ambas ciudades en 2024. Desde la operadora española no se desmiente este extremo. 

Una vez entre en servicio, competirá con los TGV InOui de la operadora estatal SNCF, con su filial de bajo coste Ouigo y con la operadora italiana TrenItalia, que rompió el monopolio en 2021 con cuatro trenes al día. Esta batalla no será sencilla, ya que la línea sólo tiene capacidad para unos 30 trenes diarios y en la actualidad están ocupados 22, lo que dificulta las posibilidades de la firma española. 

Fecha condicionada por la llegada de los nuevos AVE

El principal inconveniente del inicio de operaciones en esta ruta es la falta de material rodante con el que prestar el servicio. Los servicios a Marsella y Lyon previstos para este verano serán realizados con material de la serie 100 adaptada a las vías francesas desde hace años, pero para llevarlos más al norte necesita nuevas homologaciones. 

Los únicos trenes disponibles para competir con la operadora estatal francesa SNCF son los nuevos Avril de la serie 106 que Renfe lleva meses esperando. Las 10 unidades que Renfe encargó a Talgo incluyen los sistemas compatibles con la infraestructura francesa, pero empezarán a llegar a partir de noviembre, sin fecha todavía confirmada y por lotes. Además, para comenzar su operativa comercial, requieren de un tiempo de adaptación que ponga a punto sus equipos a bordo y otro tipo de pruebas, por lo que esa fecha primaveral se antoja más factible que la de diciembre. 

Hasta entonces, Renfe aspira a arrancar sus operaciones en dos rutas que ya conoce bien: Barcelona-Lyon y Madrid-Marsella. El Gobierno aseguró que el arranque de estos servicios tendría lugar este mismo verano, un proceso que la operadora lleva meses preparando mediante la realización de distintas pruebas técnicas y de homologación. Para gestionar esta primera etapa en las vías galas ha constituido una oficina en el país con equipo propio que finalmente tendrá como base Lyon. 

En respuesta a las críticas lanzadas desde el Gobierno de España, que aseguraba que Francia estaba poniendo "trabas" a la entrada de Renfe en el país, el embajador galo Jean-Michael Casa quiso defender la postura de su país asegurando que "se queja mucho". Según su versión, estos impedimentos "resultan de algunas elecciones técnicas, siendo el principal problema el sistema de señalización de los trenes que quería introducir en Francia y que no es compatible con el sistema instalado en la línea de París a Lyon", según señaló en una entrevista el pasado mes de abril. 

La filial checa de Renfe amplía sus servicios

Mientras las cosas en Francia van más lentas de lo esperado, los planes en República Checa continúan viento en popa. Leo Express, la operadora participada en un 50% por Renfe, ha anunciado una inversión de 4,5 millones de euros de sus propias reservas para expandir su presencia en las vías de Centroeuropa. 

Tras incrementar un 15% su cifra de viajeros, este 2023 lanzará un nuevo servicio entre Bratislava y Komárno (Eslovaquia) y aumentará sus frecuencias a Cracovia (Polonia). También ha solicitado nuevos surcos para en 2024 poner en marcha nuevos trayectos internacionales y aumentar sus frecuencias en las rutas actuales.