Esta vez se busca un solo contratista

El Gobierno lanza el recuento del nuevo ciclo electoral con Indra como favorita

El nuevo acuerdo marco, para las elecciones nacionales y locales, parte de un presupuesto de 40 millones de euros, ligeramente por encima del anterior de 2018. 

Recuento elecciones urna
El contrato es el de la recogida y consolidación de los datos del escrutinio.
Agencia EFE

Llega el nuevo ciclo electoral y el Gobierno prepara los mimbres para acelerar la contratación del encargado de gestionar los datos del escrutinio. Así estos días el Ministerio del Interior ha lanzado la licitación de un acuerdo marco para los próximos cuatro años, donde se incluyen no sólo las próximas elecciones generales, sino también las locales y europeas. El presupuesto base es ligeramente superior al de 2018: casi 40 millones de euros. Y el Ejecutivo prevé que sólo haya un licitador. Indra es el que tiene todas las 'papeletas' para ser el elegido.

En ese año 2018, la empresa decidió poner en marcha esta figura del acuerdo marco para agilizar los trámites. El Ejecutivo de Pedro Sánchez, tras la moción de censura, fue el que formalizó el proceso que arrancó unos meses antes, bajo el mandato de Mariano Rajoy. Se echó mano a este vehículo ante "la brevedad de los plazos y la imprevisibilidad con la que se pueden convocar las elecciones a Cortes Generales". La fórmula permite la adjudicación entre las empresas elegidas de una manera mucho más rápida.

Ahora, cuatro años después y tras la pérdida de vigencia del anterior, el Ejecutivo pone de nuevo en marcha un nuevo contrato por un periodo de tiempo idéntico. El nuevo ciclo electoral arranca en el año 2023 con las municipales, europeas y generales, que son las que afectarían a esta licitación, pues cada comunidad autónoma tiene plena autonomía para la contratación del proveedor para sus propios comicios. Aunque no es vinculante, el presupuesto con impuestos es de 39,9 millones de euros

El trámite está en su fase más inicial y aún no se ha hecho pública la memoria justificativa, ni otros documentos preceptivos. Se ha llevado a cabo el anuncio previo pero da alguna pista de lo que se espera. En el anterior se preveía que hubiera más de un operador que presentara credenciales. En aquellas fechas Scytl, la tecnológica catalana rival de Indra, competía con la empresa semipública por muchos de los contratos de este sector electoral. Ahora, a diferencia de entonces, se espera que sólo haya un licitador

Con toda probabilidad será la empresa presidida por Marc Murtra la que salga como adjudicataria del acuerdo marco. Scytl ya fue 'expulsada' del anterior acuerdo marco después de que el propio Ministerio del Interior decidiera rescindir el contrato. Hace algo más de un año decidió romper la relación por las "deficiencias" en la prestación del servicio de obtención y difusión de los datos del escrutinio en las elecciones municipales de 2018. Además también apreció un "grave incumplimiento" en las condiciones económicas pues superó el precio máximo.

La Junta de Castilla y León admitió en el concurso de principios de año que el único con capacidad para abordar un contrato de estas características era Indra

En España existen algunos proveedores específicos del sector electoral, aunque más regionales o de un tamaño menor. Es por ejemplo el caso de Ibermática, la compañía tecnológica vasca que ha sido la adjudicataria en numerosos comicios de su territorio durante las últimas décadas. Sin embargo, sus capacidades son limitadas para abordar comicios complejos como los municipales o muy relevantes como los generales. La Junta de Castilla y León admitió en el concurso para este contrato antes de las elecciones del pasado mes de febrero que la única con capacidad económica y técnica de asumir estos trabajos era Indra.

A nivel regional, otras comunidades ya están dando los pasos para las adjudicaciones. La Comunidad Valenciana está a punto de adjudicarle el contrato a Indra por 1,29 millones de euros después de que la Mesa de Contratación rechazara calificar la oferta de la empresa semipública en "presunta baja desproporcionada" (al proceso también se había presentado la empresa española Odec). Por su parte, Cantabria lanzó el pasado mes de abril el anuncio previo de la licitación por 800.000 euros pero aún no ha dado más pasos para avanzar.

Lo que sí que ha concluido ha sido la elección de los proveedores de cabecera del acuerdo marco para la adquisición y distribución de diverso material electoral por un presupuesto base de casi 11 millones de euros. En total han sido cinco lotes, entre los que estaban la adquisición de urnas de votación, sobres, actas o kits de material de oficina, que se han 'entregado' a un total de seis empresas. La formalización del acuerdo se hizo a mediados de este mes de julio tras más de siete meses de gestiones.

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