Nuevo 'megaproyecto' 

Ferrovial, Acciona y Sacyr se unen en Perú para una autopista de casi 2.170 millones 

Los tres grupos constructores se han aliado para proponer a las autoridades peruanas la construcción, el mantenimiento y la financiación de una autopista "inteligente" que unirá la ciudad de Callao con la capital Lima. 

Ferrovial, Acciona y Sacyr se unen para la construcción de una autopista en Perú
Ferrovial, Acciona y Sacyr se unen en Perú para una autopista de casi 2.170 millones. 
Sacyr

Ferrovial, Acciona y Sacyr han constituido un consorcio en Perú para promover a las autoridades locales la construcción de una nueva autopista. Estaría ubicada en el área metropolitana de Lima y contaría con 35 kilómetros de longitud, con una inversión aproximada de 2.380 millones de dólares (2.170 millones de euros). 

Tiene por nombre el Anillo Vial Periférico, que uniría la capital peruana con la ciudad de Callao. La iniciativa fue presentada por Cintra, filial de Ferrovial, a la que posteriormente se adscribieron Acciona y Sacyr, que han incorporado modificaciones al proyecto. 

A partir de ahora se abrirá un periodo de 90 días, en los que terceras empresas podrán pujar por el proyecto en competencia con el consorcio español, según ha informado la Agencia de Promoción de la Inversión Privada de Perú (Proinversión). 

En el caso de que no se presenten más ofertas, el contrato será adjudicado automáticamente a este consorcio, previsiblemente en el primer trimestre de 2024. Si se efectuasen más pujas, se llevará a cabo un concurso público y el contrato se entregaría en el segundo trimestre del año. 

Ingresos de recaudación de peajes 

El grupo que reciba la concesión será el encargado del del diseño, financiación, construcción, operación y mantenimiento de la autopista, que recorrerá 11 distritos en Lima Metropolitana y un distrito del Callao, beneficiando a 4,5 millones de personas

La vía está catalogada como una "carretera inteligente", y se concederá mediante la modalidad de Asociación Público-Privada (APP) cofinanciada. De esta forma, los ingresos por recaudación de peajes cubrirán íntegramente los costes de operación y mantenimiento, y parcialmente los costes de inversión.

El plazo de la concesión será de 30 años contados desde la fecha de suscripción del contrato de concesión o hasta que se alcance el valor presente de los ingresos de peaje (VPIP) establecido en el contrato de concesión, lo que ocurra en último lugar. Si el VPIP no se ha alcanzado al año 30, el plazo podrá ser prorrogado.

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