El fabricante de máquinas de chips ASML factura el doble a pesar del cierre de China

Después de verse afectado por las restricciones a la exportación de sus nuevos modelos a China, el fabricante neerlandés de máquinas de chips ASML logró registrar una facturación total de 6.700 millones de euros durante el ejercicio del primer trimestre de 2023, multiplicando por dos la del mismo periodo del año pasado. 

Asimismo, el beneficio que obtuvieron fue de unos 2.000 millones de euros, casi el triple que durante el primer trimestre de 2022, porque las ventas fueron más altas de lo que estimaba la propia compañía, lo que, según ASML, se debe a que los sistemas demandados por los clientes se instalaron antes de lo calculado.

Según los resultados económicos publicados este miércoles, ASML asegura que las ventas netas durante los tres primeros meses de este año fueron de 6.700 millones de euros, con un margen bruto del 50,6 %, y subrayó que espera mantenerse en una facturación de entre 6.500 y 7.000 millones durante el segundo trimestre del año, con un margen bruto similar a los primeros meses de este año.

Imposibilidad de ventas al gigante asiático

Además, espera que la facturación de 2023 crezca más del 25 % en comparación con el año pasado. "La demanda general sigue superando nuestra capacidad para este año y actualmente tenemos una cartera de pedidos de más de 38.900 millones de euros. Nuestro enfoque continúa siendo maximizar la producción del sistema", señaló el presidente y director ejecutivo de ASML, Peter Wennink.

Actualmente, el fabricante no puede vender nuevos modelos de sus máquinas de chips a China. El pasado marzo, el Gobierno neerlandés le impuso más restricciones a la exportación de tecnología sensible al mercado chino como medida necesaria para “la seguridad (inter) nacional”, señaló la ministra neerlandesa de Comercio Exterior, Liesje Schreinemacher.

EE.UU exige nuevas restricciones a ASML

En una carta enviada al Parlamento neerlandés, Schreinemacher explicó que las restricciones afectan a "tecnologías muy específicas en el ciclo de producción de semiconductores, en el que Países Bajos tiene una posición única y de liderazgo, como la litografía y deposición de inmersión ultravioleta profunda (DUV) más avanzada".

Esto hace que cada solicitud de licencia de exportación a China se considere caso por caso para evitar que los chips se usen con fines militares no deseados. Estados Unidos exige restricciones adicionales a ASML por temores a que, entre otras cosas, los chips fabricados con máquinas neerlandesas terminen en equipos de defensa chinos, como drones.

ASML, líder mundial en el desarrollo de máquinas de chips, ya dijo que no espera que estas restricciones tengan un gran impacto en su facturación, puesto que solo afectan a las tecnologías más avanzadas, y ASML puede seguir vendiendo la tecnología más común que ofrece.