La banca española enfoca parte de su estrategia comercial en captar más autónomos. En plena moderación de la demanda de crédito, la apuesta de las entidades pasa por centrarse en crecer vía nuevos clientes. Para ello han comenzado a exprimir las promociones empleadas en el área de particulares, usándolas como gancho para atraer a los trabajadores por cuenta propia. Uno de los últimos en mover ficha ha sido Banco Sabadell, que ha presentado este martes una propuesta para 'seducir' a este colectivo.
En concreto, la entidad pilotada por César González-Bueno ha anunciado la puesta en marcha de una cuenta digital sin comisiones ni condiciones que remunerará con un 2% TAE el saldo hasta un máximo de 20.000 euros y bonificará con 120 euros anuales por domiciliar la cuota de la Seguridad Social de manera indefinida. Con ello, la entidad catalana consolida su paso al frente en el avance de la digitalización de clientes, especialmente, en un ámbito como el de los autónomos, donde registran con una cuota del 18,6%. Esto quiere decir que de los 3,37 millones de afiliados medios al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), Sabadell ya concentra 600.000 usuarios.
Teniendo en cuenta que los trabajadores de este sistema suelen trabajar con más de un banco, su intención pasa por reforzar su liderazgo en este sentido como ya lo son en empresas, en la que llegan al 44%. No son los únicos que han recurrido a este tipo de ganchos para intentar canalizar más demanda. BBVA lanzó el pasado mes de enero una ofensiva centrada en pymes y autónomos a través de la cual 'premia' con 400 euros brutos a aquellos que se suscriban a la Cuenta Bienvenida y domicilien el pago de impuestos o seguros sociales, de los que devolverá un 3% del importe hasta un tope de 100 euros trimestrales.
Destaca también Banco Santander, que en su catálogo dispone de una cuenta corriente para este tipo de profesionales que 'regala' 300 euros brutos si llevas dos recibos mensuales y el pago del RETA. De su lado, Bankinter ha optado por una cuenta profesional remunerada que da un interés del 5% TAE el primer año y un 2% el segundo ejercicio hasta un máximo de 10.000 euros, mientras CaixaBank y Unicaja comercializan 'planes cero comisiones'. El crecimiento a través de la vinculación se ha convertido en el principal campo de batalla de las entidades españolas en los últimos meses con el objetivo de convertirse en la entidad de referencia.
El giro comercial no es baladí, ya que esta situación les permite optimizar su rentabilidad en medio de la moderación de la actividad crediticia. La caída del saldo vivo a mínimos de 2006 en hipotecas, influido por el incremento del ritmo de las amortizaciones anticipadas a raíz de la subida de los tipos de interés, también se ha notado en el área de empresas, donde el saldo vivo ha experimentado un recorte del 4,3% en el arranque del año. Esto supone que con respecto a enero de 2023, las sociedades no financieras han recortado más de 20.000 millones en financiación bancaria, con la demanda estancada, optando por los préstamos al exterior y las emisiones de deuda corporativa.
Los mimos de la banca al segmento empresarial también se reflejan en el interés que pagan por los depósitos, con rentabilidades que llegan a ser muy superiores a las ofrecidas a particulares. Según los últimos datos ofrecidos por el Banco de España (BdE), el tipo medio al que la banca ha remunerado el pasivo de las sociedades no financieras ha alcanzado el 3,59% en el inicio de 2024, máximos de 2008, en contraste con el 2,38% de media con el que remunera a las familias.
