Astara Mobility avanza en su posible salida a bolsa. La filial de movilidad de la empresa industrial vasca Bergé ha completado su transformación de sociedad limitada a sociedad anónima como requisito obligatorio previo ante una eventual salida al parqué.
Así se constata en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME). Fuentes de la compañía consultadas por La Información han preferido no hacer comentarios. Astara Mobility ha contratado los servicios de la consultora PwC como su nueva auditora -en sustitución de Grant Thornton- para avanzar en el camino, un hito que prevé culminar a finales del primer trimestre de 2024, aunque todo dependerá de la situación de los mercados.
La valoración de la compañía se situaba en 2.000 millones al inicio de este proceso, que adelantó Expansión. Fue a principios de agosto cuando la empresa vasca contrató los servicios del banco de negocios Lazard como primer paso de cara a un estreno bursátil de Astara el año que viene.
Rebalancear el negocio hacia una plataforma de movilidad
Bergé espera mantener una participación mayoritaria en Astara Mobility, donde actualmente cuenta con el 75% de las acciones, mientras que el 25% restante está bajo el control de Mitsubishi Corporation. El movimiento de la salida a bolsa de la compañía responde a la intención de la empresa de captar recursos con los que financiar su 'giro de timón' a nivel estratégico. El objetivo es rebalancear su principal negocio, la logística de automóviles, hacia una plataforma integrada de movilidad.
La empresa da servicio exclusivo de distribución a compañías asiáticas como Mitsubishi, Subaru y SsangYong. Astara opera en 19 países de Europa, América Latina y el sudeste asiático y prevé una facturación de más de 5.5000 millones de euros para 2023. Además, emplea a más de 3.000 personas. El actual entorno de la demanda con las nuevas tendencias de consumo por parte de los usuarios es lo que ha provocado que la compañía apueste por posicionarse en un mercado con mayor recorrido como es el de la movilidad.
Tan solo en España, Astara consiguió el año pasado una consolidación en el modelo de negocio, profundizando en la visión de convertirse en una compañía de movilidad global. "Se ha producido un crecimiento muy fuerte de ingresos en las filiales de movilidad, lo que permite a la sociedad consolidar su modelo de negocio y pensar en un crecimiento futuro de estos nuevos negocios en otros mercados, asimismo se han incorporado al grupo nuevas filiales en el ámbito de la distribución tradicional de vehículos, lo que que consolida y potencia la estrategia que comenzó en el 2021 tras el cambio de denominación a Astara Mobility", señala la empresa en el informe de gestión de las cuentas correspondientes a 2022.
La compañía incrementó el beneficio neto en el territorio nacional un 45% el curso pasado hasta los 62,5 millones de euros, al tiempo que elevó un 58% el importe neto de la cifra de negocios hasta 112 millones de euros, según las últimas cuentas depositadas en el registro mercantil.
Orígenes y transformación
Bergé Automoción, que nació en 1979, completó su transformación en Astara en noviembre de 2021 tras seis años y "decenas de millones de euros" de inversión. El resultado fue la integración de diferentes productos y servicios centrados en la movilidad como propiedad, suscripción, canal particular y de empresas.
Para ello, cuenta con cuatro divisiones especializadas: Trive (plataforma de gestión de vehículo nuevo, usado y renting); Cardive (plataforma de suscripción de vehículos a particulares), Fleeet (plataforma de suscripción de vehículos para profesionales,) y BotOn (dedicada al vehículo conectado). Astara también se ha comprometido a alcanzar la neutralidad de carbono en sus operaciones para 2027 mediante el consumo total de energía renovable y la electrificación de su flota.
Ok Mobility Group
La compañía de movilidad OK Mobility Group, sociedad matriz del grupo OK Mobility, también decidió en verano abordar un proceso de transformación de su tipo social para convertirse en sociedad anónima, que conllevó una reducción de su capital social de 42,23 millones de euros a 25 millones de euros. El fin era sofisticar y fortalecer la estructura corporativa y mejorar su capacidad financiera, permitiéndole acceder a nuevas oportunidades de crecimiento.
De este modo, una vez transformada, OK Mobility dejó de estar sujeta a las limitaciones regulatorias que actualmente se aplican a las sociedades de responsabilidad limitada en España en relación con emisiones de deuda. La empresa cuenta con un programa de pagarés de 84 millones de euros, incorporados a negociación en el Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF), por lo que su transformación le brinda la posibilidad de incrementar y flexibilizar sus emisiones de deuda en el futuro. También informó de que estaba considerando la posibilidad de constituir un consejo de administración como órgano de gobierno en el futuro.
