Invierte más de 700 millones 

Amancio Ortega, el singular 'caballero blanco' de la SEPI en la red energética

Pontegadea, la sociedad de cartera del empresario gallego, ha adquirido el 5% de Red Eléctrica, el mismo porcentaje que compró en Enagás en 2019.

El fundador de Inditex, Amancio Ortega.
El fundador de Inditex, Amancio Ortega.
Cabalar | EFE

El fundador de Inditex, Amancio Ortega, está decidido a convertirse en un peso pesado del sector energético en nuestro país. A través de su 'sociedad cartera' Pontegadea, el empresario gallego ha invertido alrededor de 450 millones de euros para hacerse con el 5% de Red Eléctrica (REE), posición que se suma al 5% que el directivo posee en Enagás desde el año 2019. Ambas transacciones han supuesto una inversión conjunta de más de 700 millones y han convertido a Ortega en el nuevo 'caballero blanco' de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en la red energética española. 

Tanto el grupo que dirige Beatriz Corredor como la compañía que preside Antonio Llardén juegan un importante papel estratégico; de hecho, su capital está blindado por ley. En aras de garantizar la seguridad del suministro en nuestro país, la norma limita al 5% la participación, directa o indirecta, que puede sumar cualquier persona física o jurídica en el capital de estas entidades. Del mismo modo, la regulación impide que dichos inversores puedan ejercer derechos políticos por encima del 3% en estas sociedades. 

El plan de Ortega de abrirse paso en el sector energético a través de grupos con un alto componente público, encaja con el Plan de Recuperación del Gobierno, donde la colaboración público-privada ocupa un lugar preferente. Muestra de ello son los Proyectos estratégicos para la recuperación y transformación económica (PERTE). Se trata de seis grandes áreas definidas por el Ejecutivo que aspiran a canalizar las ayudas europeas y que el Estado desarrollará en cooperación con el sector privado. Moncloa prevé priorizar aquellos que apoyen la industria española, como adelantó La Información

De hecho, la ofensiva de Amancio Ortega en Red Eléctrica ha convertido al empresario en el segundo accionista del grupo solo por detrás de SEPI, que acapara el 20% de su capital. La transacción, que se ha materializado esta semana, ha permitido al fundador de Inditex posicionarse como el primer inversor privado de la compañía, tras superar el 3,04% del gigante estadounidense Blackrock. Al día siguiente de su entrada en REE, trascendió la adquisición por parte del empresario del 12% de Redes Energéticas Nacionales (REN), el grupo luso que gestiona el sistema de transporte de luz y gas natural de Portugal. El valor de la operación superó los 188 millones.

En el caso de Enagás, el empresario movió ficha en la ampliación de capital de 500 millones que la empresa encargada de la gestión de la red nacional de gaseoductos realizó en diciembre de 2019. Enagás ejecutó una emisión de 23,3 millones de acciones a un precio de 21,5 euros por título, de las que Pontegadea, a través de Partler 2006 -brazo inversor con el que el empresario también participa en Inditex-, adquirió la friolera de 13 millones de acciones, casi un 56% del total. Con esta operación, Ortega igualó la participación de SEPI en el capital de Enagás.

El empeño de Ortega por reforzarse en el negocio energético regulado diversifica su esfuerzo inversor y casa con el espíritu del Plan de Recuperación del Gobierno

Ambas inversiones confirman el interés del empresario por diversificar la cartera de su grupo societario -formado por Pontegadea Inversiones, Pontegadea GB 2020 y Partler 2006-. Tradicionalmente, el esfuerzo inversor de la sociedad patrimonial se ha enfocado en el sector inmobiliario. Es en el terreno del 'real state' donde Ortega ha atesorado un verdadero imperio con el que ha adelantado a grandes socimis del mercado bursátl español como Colonial o Merlin. 

La crisis de la pandemia ha asestado un duro golpe a los activos del empresario gallego vinculados a este negocio que se devaluaron un 7% en 2020, al pasar de 15.163 millones en 2019 a 14.075 millones al cierre del pasado ejercicio. La caída del beneficio de Pontegadea en el año de la pandemia, la primera de su historia, se cifra en un 62%. En este contexto, la sociedad ha doblado su apuesta por el negocio energético, concretamente, con inversiones en compañías cotizadas y altamente reguladas que no son la 'diana' habitual del directivo.

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