Tuvieron que dividir el dinero

La trágica vida de una pareja después de ganar 168 millones en el Euromillones

En este caso, el dinero no les otorgó la felicidad plena. El matrimonio aseguró que no quería hacer pública su victoria, pero les resultó casi imposible. Además, tuvieron que afrontar numerosas tragedias familiares.

Adrian y Gillian Bayford, ganadores del Euromillones.
Adrian y Gillian Bayford, ganadores del Euromillones.
The National Lottery UK

No son pocos los ganadores del Euromillones u otros sorteos de lotería similares que han advertido de la infelicidad que puede llegar a generar esta victoria millonaria. Una de las premiadas más conocidas, Jane Park, ganó un millón de euros en este sorteo europeo cuando apenas tenía 17 años y sufrió toda clase de infortunios más adelante. Según explicaba en medios locales, quería demandar a la Lotería Nacional de Reino Unido por permitir que los menores de edad puedan apostar en estos juegos.

Otros, por su parte, han terminado perdiendo relación con sus familiares. Una afortunada explicaba en un foro online todos los errores que había cometido después de recibir 16 millones de euros en la lotería. De hecho, destaca que dejó que relacionarse con algunos miembros directos de su familia porque le reclamaban compartir el premio.

Los escoceses Adrian y Gillian Bayford se llevaron un bote de 168 millones de euros en un sorteo del Euromillones de 2012, algo que les cambió por completo la vida. No solo en términos económicos, también en lo personal. Y es que tan solo dos años después su relación se desmoronó y tuvieron que repartirse las ganancias millonarias.

Consejos de millonarios si ganas el Euromillones

El matrimonio terminó divorciándose 15 meses después de ganar el premio del Euromillones. Optaron por dividir sus ganancias y seguir sus vidas por caminos diferentes, recogen en The Sun. Gillian decidió mudarse a otra localidad escocesa y montó una empresa. Ella misma señaló en los medios al enterarse de las victorias de otras parejas de jugadores del Euromillones que les deseaba mucha felicidad. "Les deseo buena suerte y les aconsejo ser sensatos. Es importante recordar que algunas personas tienen motivos ocultos", comentaba Bayford.

La ganadora montó un negocio inmobiliario junto a una amiga para continuar aumentando su patrimonio, pero al tiempo su socia tuvo que abandonarlo. También volvió a casarse, en esta ocasión con un ex estafador, y celebró una lujosa boda en la ciudad costera de Saint Andrews. Ambos tuvieron un hijo a los 48 años de edad durante el confinamiento.

Por su parte, Adrian tuvo malas experiencias en sus relaciones personales después del divorcio y en 2021 tuvo que vender la mansión que compró con el premio del Euromillones. Para más problemas, el hijo común de la pareja sufrió un accidente con un quad en ese mismo inmueble, por lo que su padre se sintió muy culpable por haberle dejado probar mientras estaba bajo su vigilancia.

Mostrar comentarios