Un 51% de importaciones fraudulentas 

El problema de la miel 'tuneada': Europa regula el etiquetado pero no contenta

La reciente propuesta de Bruselas para mejorar la información al consumidor en productos como la miel, incluyendo el país o países de origen, es vista como insuficiente en opinión de los apicultores y consumidores.

El extraño caso de la miel: Europa regula su etiquetado pero no contenta a nadie
El extraño caso de la miel: Europa regula su etiquetado pero no contenta a nadie
Europa Press

El debate sobre el etiquetado de los alimentos siempre despierta pasiones. Pero si nos centramos en la miel, además, gran parte de la supervivencia de la apicultura española se decide en este lance. En concreto, la propuesta presentada recientemente por la Comisión Europea promueve la revisión de las normas de comercialización de algunos alimentos como la miel. Lo que pretende Bruselas es hacer obligatorio, en toda la Unión Europea, que en el etiquetado se incluyan el país o países de origen (esto último si nos referimos a mezclas). Una novedad que es tachada de "cortísima" de forma unánime por los productores de miel española y que tampoco convence a las organizaciones de consumidores. Al respecto, el Ministerio de Agricultura ya dio a conocer a los ministros europeos de Agricultura en marzo la difícil situación de la apicultura española y su preferencia por una norma más ambiciosa en el etiquetado. 

La propuesta de la Comisión Europea es también una respuesta a la petición que realizó en el consejo de ministros europeo del ramo en marzo el titular de Agricultura español Luis Planas, así como de todo el sector, para que se pusiera sobre la mesa una propuesta "que permita a los Estados miembros mejorar la información que facilita a los consumidores". En cualquier caso, todas estas modificaciones están abiertas a observaciones del público interesado durante un mes (lo que en España se conoce como exposición pública) y, posteriormente, pasará a ser estudiada para su aprobación por el Parlamento Europeo y el Consejo Europeo.

Cómo se 'tunea' la miel 

Llueve sobre mojado para los apicultores españoles, que protagonizaron una sonada concentración frente al Ministerio de Agricultura el pasado 9 de marzo, y llevan años denunciando el 'tuneo' de una parte importante de la miel que llega al consumidor español.  Especialmente aquellas que son el resultado de la mezcla de mieles de orígenes diferentes y que lucen un 'made in Spain', que solo es cierto en un porcentaje muy bajo. Todo, en muchas ocasiones, previo paso por un primer país comunitario con fronteras más laxas. Desde COAG estimaban, en un informe publicado a principios de este año, que entre enero y noviembre de 2022 se importaron desde las industrias españoles envasadoras 35.260 toneladas de miel. Esto fueron 3.633 toneladas más que lo importado durante todo 2021 y 3.009 toneladas más que en 2017. En el conjunto del año pasado las importaciones de miel superaron en España los 37,5 millones de kg y, en toda la UE, los 342,3 millones de kilos.

España importó más de 37,5 millones de kg de miel en 2022 y, en toda la Unión Europea, las importaciones alcanzaron los 342,3 millones de kilos 

En esta línea, un estudio de la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF) y el Centro de Investigación Conjunta de la Unión Europea publicado el pasado 23 de marzo ha dado la razón a las protestas de los apicultores y las suspicacias de muchos consumidores. Según este análisis, realizado a partir de una serie de controles realizados en frontera en los años 2021 y 2021 en 15 estados miembros (entre ellos, España), el 46% de la miel importada no es auténtica y, por lo tanto, no cumple con la Directiva 2001/110/CE de la miel de la Unión Europea. Una situación que se eleva al 74% en el caso de las importaciones de China y al 93% en el de las mieles traídas de Turquía. En el caso de España, las importaciones con producto fraudulento alcanzan al 51% según este estudio e implican al 85% de las empresas importadoras que tienen, al menos, un caso positivo.

Insatisfacción de productores y consumidores 

Entonces, ¿será suficiente la propuesta realizada por la Comisión Europea? En opinión de la responsable de apicultura de Asaja, Vanesa Iglesias, "no soluciona nada" y cree que "la solución pasaría, si no quieren especificar el porcentaje, por que se prohibieran las mezclas y si nuestra miel vale cinco mientras que las otras dos que decida el consumidor". Iglesias ve imposible que una situación como la que mencionan los apicultores españoles se replique en otros sectores como el del aceite de oliva. En una línea similar se pronuncia su homólogo en COAG, Pedro Loscertales, quien en un comunicado hace un par de días recordaba que lo propuesto por la Comisión Europea sobre los países de origen es "algo que ya es obligatorio en España desde 2020 y que no ha solucionado ni los problemas de importaciones masivas de siropes y sucedáneos de miel a nuestro mercado ni la existencia de mezclas sin orígenes comparables de las grandes superficies". 

Para Loscertales el problema está en "la confluencia de la aplicación de varias normativas comunitarias" y cree que la Comisión ha perdido "una buena oportunidad" de demostrar su compromiso con el sector apícola. En su opinión, con la modificación propuesta "las empresas importadores, envasadoras y comercializadores de  miel a gran escala estarán frotándose las manos con esta propuesta". En cualquier caso, espera que la Eurocámara y el Consejo Europeo vayan más lejos y les apoyen. 

Desde Cooperativas Agroalimentarias critican que "la Comisión ignora una vez más la posición de los apicultores europeos y sus cooperativas" y defienden alternativas  como la inclusión de los países de origen, con porcentaje, en el etiquetado de origen así como la prohibición de la ultrafiltración de la miel, el secado forzado e identificación de las mieles calentadas. "Estas medidas no han sido abordadas por la Comisión", lamentan desde esta organización agraria.  

En COAG recuerdan que la inclusión de los países de origen en el etiquetado en la miel es "obligatorio en España desde 2021" y que no ha solucionado nada

Unas inquietudes compartidas desde organizaciones de consumidores como la OCU que comparte la necesidad de una mayor transparencia tachando las etiquetas de "insuficientes" para que el consumidor se forme un criterio informado y decida. En este sentido, junto a COAG viene siguiendo de cerca la comercialización de este producto y aconsejando sobre su compra.  

Tormenta perfecta sobre la apicultura española

Para Vanesa Iglesias, responsable de apicultura en Asaja y apicultora en Extremadura, apunta que "el sector está agonizando en estos momentos: con la primavera y la sequía la campaña ha sido horrorosa, hay mucha mortalidad, y apenas se ha producido polen. Además, la varroa (un ácaro que ataca a las larvas) nos ha afectado mucho".  En este sentido, esta empresaria que comparte actividad con su marido e hijo en una explotación con 1.500 colmenas predice que, de seguir así la situación, "en el año 2024 se darán de baja muchas explotaciones". 

La crisis en la apicultura protagonizó parte del discurso del ministro de Agricultura, Luis Planas, en el consejo de ministros de Agricultura de marzo y, esta semana, el Consejo de Ministros aprobó la distribución de casi cinco millones de euros de la denominada 'Intervención Sectorial Apícola (ISA)' dentro de la Política Agraria Común (PAC). Para el periodo de 2023-2027 España recibirá un total de 9,6 millones anuales del presupuesto comunitario para este fin. Esto supone un montante global de 19,2 millones de euros. Desde UPA estiman que estas ayudas directas serán de entre 750 y 2.000 euros como máximo para los apicultores profesionales (aquellos que cuenten con más de 150 colmenas) y los trashumantes.

"No tengo ingresos desde la campaña 2021-2022, tengo la miel parada y, como yo, miles de explotaciones familiares", Vanesa Iglesias (apicultora, Asaja)

Iglesias explica que venden su miel al por mayor y  que mantiene la mayoría de su producción en el almacén "teniendo que soportar unos costes triplicados" por la guerra de Ucrania y la sequía. "No tengo ingresos desde la compaña 2021/2022, tengo la miel parada y como yo miles de explotaciones familiares, de jóvenes agricultores...", apunta sobre una actividad que recuerda fija población en las zonas rurales. 

Mostrar comentarios