La recuperación en casi 1.000 millones de euros en depósitos y cuentas corrientes en el mes de septiembre por parte de las familias ha sido un espejismo. Los hogares han vuelto a echar mano de sus ahorros bancarios en el mes de octubre para amortizar hipoteca, hacer frente a la inflación y para invertir en otros productos que ofrecen una mayor remuneración como son los fondos de inversión y las Letras del Tesoro.
Según los últimos datos publicados por el Banco de España, el ahorro de los hogares y sociedades no financieras sin ánimo de lucro acabaron octubre en 975.800 millones de euros, su nivel más bajo en lo que va de año. Se trata de una reducción, por lo tanto, de 7.000 millones de euros, un 0,7% en términos porcentuales, puesto que en septiembre el ahorro de los hogares en productos bancarios se situó en los 982.800 millones de euros.
El ahorro de las familias marcó máximos a cierre de diciembre del año pasado, cuando tocó el billón de euros. En concreto, se situó 1.004 millones de euros. Pero a partir de ahí, este dinero no ha dejado de disminuir. En total, las familias han retirado en lo que va de año 28.500 millones de euros, lo que supone una disminución del 2,84%. Este ahorro se ha ido, tal y como confirmó el Banco de España, a tres grandes partidas.
La primera, la amortización adelantada de las hipotecas ante la subida del euríbor. No hay que olvidar que el índice al que se referencian la mayoría de los créditos a tipo variable está referenciados al indicador. Y, aunque el euríbor en noviembre ha registrado la primera caída intermensual en tres años, todavía se encuentra por encima del 4%, lo que supone 153 puntos básicos con respecto a hace un año.
También los hogares están echando mano a sus ahorros por la inflación. Los precios siguen por encima del objetivo del 2%, objetivo marcado por el Banco Central Europeo (BCE). En octubre marcó el 3,50%, mientras que la inflación subyacente, que sólo tiene en cuenta los precios de los alimentos, cerró el décimo mes del año en el 5,20%.
Finalmente, aunque es cierto que ha habido un trasvase de cuentas a depósitos a plazo fijo (por el incremento de las remuneraciones), el hecho de que todavía no hayan reflejado totalmente la subida de los tipos de interés por parte del BCE ha provocado que muchos hogares hayan optado por destinar parte de sus ahorros a fondos monetarios y de renta fija y a la compra de Letras del Tesoro para lograr una mayor rentabilidad. Precisamente, los inversores particulares volvieron a marcar nuevo récord como tenedores de deuda del Estado a corto plazo.
