En un año 2022 marcado por los efectos de la guerra en Ucrania, de la subida de tipos y de la crisis energética e inflacionaria (la tasa anual de IPC se situó de media en el 8,5% el conjunto del ejercicio) desaparecieron un total de 26.207 empresas en el país, un 10% más que el año anterior y la cifra más alta desde que se elabora esta estadística en 1995. El comercio y la construcción como actividades más afectadas. Los datos que ha hecho públicos este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE) confirman que en el mismo periodo de tiempo cayó también el número de sociedades creadas, un 2% anual hasta las 99.067. Esta cifra indica que, a pesar de la incertidumbre y la coyuntura adversa, los emprendedores siguieron adelante y pudieron poner en marcha sus proyectos.
La cifra de destrucción de empresas es la mayor, al menos, de los últimos cinco años. Es superior, incluso, a las más de 20.300 empresas que desaparecieron en 2020, en plena pandemia de Covid. Las más afectadas fueron las del Comercio (representaron el 19,1% de las que se perdieron) y las de la construcción (el 16,4% de las disueltas). En ambos casos su actividad se vio afectada también por el encarecimiento paulatino de los costes de financiación, a medida que el Banco Central Europeo tuvo que empezar a subir los tipos en julio para atajar la inflación.
El precio del dinero en la Eurozona cerró el año pasado en el 2,5% tras la subida más acelerada desde que existe el euro, y el emisor volvió a elevarlo este mes hasta el 3%. A esto se suma el fuerte encarecimiento de los costes de las materias primas básicas que viene reflejando otra estadística publicada por el INE, el Índice de variación de precios de los materiales de construcción. Solo de enero de 2021 a junio del año pasado (cuando empezó a aplicarse la revisión de precios) la energía subió casi un 90%, el aluminio un 60% y el cemento un 20%.
Los datos publicados este viernes reflejan cómo junto con las empresas de comercio y construcción en el último año también fue significativo el porcentaje de empresas Inmobiliarias, financieras y de seguros disueltas (14,5%). Si s toman las cifras por territorios, las comunidades con mayor número de disoluciones fueron Comunidad de Madrid (8.842), Andalucía (3.988) y Comunidad Valenciana (2.177).
Menos dinamismo en la creación de empresas
La creación de empresas fue menos dinámica que el año anterior, pero se mantuvo por encima de los ejercicios previos en términos de volumen (de 2018 a 2020). Por actividad económica, la creación de sociedades en 2022 estuvo liderada por el comercio, que acaparó un 19,5% del total de empresas de nueva creación, seguido por las inmobiliarias, financieras y seguros, con un 16,9%. Con la caída registrada en 2022, la constitución de empresas volvió a tasas negativas tras haberse disparado un 27,8% el año anterior, coincidiendo con el levantamiento de las restricciones que se aprobaron para hacer frente a la pandemia. En 2020, la creación de empresas se hundió un 15,7% y en 2019 bajó un 1,2%.
El capital suscrito en el último año para constituir estas nuevas sociedades aumentó un 2,9%, mientras que el y el capital medio se incrementó un 5,1%. El pasado ejercicio ampliaron capital 29.024 sociedades mercantiles, un 0,7% menos que en 2021. El capital suscrito en estas ampliaciones se redujo un 27,8% y el capital medio cayó un 27,2%.
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