La fiebre experimentada en los últimos años por el autoconsumo como alternativa para ahorrar en la factura de la luz ha disparado el intrusismo en el sector y vuelve a poner de manifiesto la falta de personal especializado. Un mensaje de alerta que han lanzado este lunes desde la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA) durante la presentación del Informe Anual de Autoconsumo Fotovoltaico 2023.
El presidente de Appa Autoconsumo, Jon Macías, ha mostrado su preocupación ante la "mala calidad" de muchas instalaciones y ha hecho hincapié en la necesidad de apostar por la formación. Por ello ha destacado la alianza de la patronal con el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) en cursos de formación a profesionales para las mejoras de las competencias en autoconsumo. "Cuando se crece a tres dígitos pasa esto en cualquier sector", ha añadido Macías, advirtiendo además del lastre que representa la "burocracia" en la tramitación de proyectos.
Tras cuatro años de fuertes crecimientos, en los que la potencia anual instalada de autoconsumo se ha multiplicado por 26, en 2023 se produjo la primera contracción en el ritmo instalador. Así, tras la paulatina desaparición de las ayudas europeas, el encarecimiento de los tipos de interés y la moderación de los precios de la electricidad, se instalaron en España 1.943 MW de autoconsumo el año pasado, lo que supone una caída del 27% en comparación con el récord de 2022.
127.000 instalaciones nuevas el año pasado
La caída fue más acusada en el sector residencial, donde la potencia instalada fue la mitad que en 2022 con 572 MW, mientras que en el industrial la potencia retrocedió solamente un 13%, hasta 1.416 MW. En total realizaron más de 127.000 nuevas instalaciones el año pasado, el 88% residenciales (111.795 viviendas) y el 12% industriales (15.509 empresas), con una inversión conjunta de 1.863 millones de euros. El menor descenso de autoconsumo industrial puede explicarse por la falta que hubo a finales de 2022 de inversores de gran potencia en el mercado español, pudiendo haberse desplazado instalaciones previstas.
Además, muchos de los proyectos que optaban a fondos europeos requerían una tramitación previa a la contratación con la empresa instaladora, lo que también provocó retrasos. "Será necesario esperar para comprobar si estas fueron las explicaciones o existe una desaceleración del mercado industrial de autoconsumo mayor de lo que apuntan las cifras", han explicado desde la asociación.
Sin embargo, pese a la caída, Appa ha valorado positivamente los datos y consideran que están en línea para cumplir con los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC). "Contamos con cerca de medio millón de instalaciones de autoconsumo en España, medio millón de apóstoles de una nueva forma de generar y consumir energía", ha subrayado Macías.
El autoconsumo generó 7.262 GWh en España en 2023, el equivalente al 3% de la demanda eléctrica. Aunque el autoconsumo aparece en las estadísticas como un descenso de la demanda, desde Appa han resaltado la importancia de que se haga un esfuerzo por parte de las administraciones y los distintos actores para tener estadísticas oficiales de esta forma de generación y consumo. "El autoconsumo ha superado en potencia a la tecnología nuclear -no en energía producida- y aún son las asociaciones las únicas que proporcionan datos sobre potencia y generación", ha dicho Macías.
131 millones de 'perdidos' por no poder vender excedentes
Durante la presentación del informe se ha mostrado también el problema que las grandes instalaciones tienen para verter y comercializar su excedente, llegándose a la situación de tener que bloquear la generación con sistemas antivertido por limitaciones regulatorias y técnicas. De este modo, el 18% de la posible generación se desaprovecha: 1.642 GWh que habrían tenido un valor cercano a los 131 millones de euros en función de un precio medio de 87,10 euros megavatio hora (MWh). Desde 2016, los millones de euros 'perdidos' por la energía no vertida al sistema se eleva a 405 millones de euros.
El ahorro de cada instalación depende de la evolución de diversas magnitudes como los precios del mercado eléctrico, con fuerte variación interanual en los últimos años, los cargos y peajes asociados y los márgenes de comercialización. En 2023 el ahorro fue de 208 euros por kW instalado para autoconsumo residencial y de 152 euros por kW para las instalaciones industriales. De este modo, como ejemplo, para una instalación tipo residencial de 4,7 kW, el ahorro anual habría sido de 981 euros, lo que es igual al 14% de la inversión media realizada (7.085 euros) e implicaría que se recuperaría la inversión en unos siete años. Por su parte, la instalación media industrial, que en 2023 tuvo una potencia de 91 kW, habría tenido ahorros por valor de 13.870 euros, equivalentes al 20% de la inversión (69.023 euros), en cuyo caso el retorno se alcanzaría en cinco años.
