Cambios en la cuota

Aumento de las cuotas de hipoteca: ¿me pueden subir el tipo fijo tras el contrato?

Una vez que el cliente tenga la Ficha Europea de Información Normalizada (FEIN) el interés de la hipoteca será inamovible, según la normativa de la ley hipotecaria.

Vivienda casa hipoteca alquiler compraventa
Fotografía de una vivienda.
Pixabay

Contratar una hipoteca es un proceso que, en ocasiones, se alarga durante unos meses. El usuario tiene que elegir una vivienda, determinar qué tipo de préstamo está buscando y comparar entre las diferentes entidades. Todo ello siendo consciente de que tiene un perfil adecuado para que el banco le quiera financiar su compra.

Pese a la espera, el cliente finalmente ve la luz al final del túnel y procede a la firma de la hipoteca. A partir de ahí tendrá claro cuál es el interés que tendrá que pagar a lo largo de la vida de la hipoteca… ¿O puede cambiar?

Lo primero que debe tener claro una persona es que no es lo mismo firmar una hipoteca fija, variable o mixta. En el primer caso, el interés no cambia, pero en los dos siguientes podrá variar en función del índice de referencia establecido, normalmente el euríbor. Esto significa que la entidad puede hacer una estimación, pero los intereses que se acaben pagando dependerán de la subida y bajada del euríbor en el caso de contratar una hipoteca variable o mixta.

En hipotecas fijas

Entonces, si se contrata una hipoteca fija… ¿No cambiará el interés? Este tipo de préstamo, como su nombre indica, tiene un interés que no varía, por lo tanto, el cliente sabe cuántos intereses va a pagar cuando firma ante notario.

Sin embargo, todo dependerá del estado de dicha hipoteca. Una vez firmada una hipoteca fija ante notario no hay marcha atrás, es decir, el interés que aplicará el banco será el que se estipula en el documento; pero antes de llegar a ese momento pueden ocurrir cambios.

El euríbor sigue escalando posiciones y, por ello, los bancos siguen con su cambio de estrategia: posicionar la hipoteca variable como su producto estrella en detrimento de las fijas. Esto se traduce en un préstamo a tipo fijo con un interés más alto. Como es algo que está ocurriendo en cuestión de semanas, puede pasar que con el banco se haya pactado un TIN y se acabe firmando el préstamo con un valor distinto.

Dos documentos clave

Una vez haya entregado la documentación al banco y se hayan realizado las tramitaciones correspondientes, el cliente recibe las conocidas como FEIN (Ficha Europea de Información Normalizada) y FiAE (Ficha de Advertencias Estandarizadas), entre otros documentos. Es en la FEIN donde aparecen las condiciones de la hipoteca que va a firmar el futuro propietario, también el interés. Si la entidad ha decidido subir el TIN de su hipoteca fija antes de entregar la FEIN el cliente se percatará de que no le aparece lo pactado, pero es legítimo. A partir de la entrega de dicho documento es cuando el interés no podrá verse modificado por condiciones externas.

Por lo tanto, una persona mantendrá el tipo de interés de una hipoteca fija una vez que se haya realizado la firma ante notario. No ocurre lo mismo en otro tipo de préstamos como pueden ser la hipoteca variable o mixta.

La negociación es clave

Si una persona se encuentra una FEIN con un tipo de interés que no es el que habló con la entidad, siempre puede intentar negociarlo para volver al de antes o, al menos, bajarlo un poco. Tiene que ser antes de firmar cualquier documento, debido a que si no no quedará otra que asumir dicho TIN.

En el sector hipotecario nada está escrito, siempre existe cierto margen de negociación. Lo importante es leerse atentamente todos los documentos que entregue el banco e intentar que, en lo máximo posible, coincidan con lo que se estaba buscando.

Mostrar comentarios