El 83,6% de los ciudadanos quiere bajar el IRPF a las rentas inferiores a 40.000 euros

El tercer 'tracking' de las elecciones generales elaborado por el Instituto DYM para La Información refleja que una amplia mayoría de los ciudadanos aprueban la rebaja del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) propuesta por el Partido Popular como parte de un "gran plan fiscal". Alberto Núñez Feijóo se ha comprometido a rebajar el IRPF a las rentas inferiores a 40.000 euros en sus primeros 100 días de mandato, una medida que respaldan el 83,6% de los ciudadanos, de acuerdo con la última encuesta. La iniciativa convence a una holgada proporción de los sondeados, con independencia del partido por el que optaron en los comicios de 2019 o su autoposicionamiento en la escala ideológica de izquierda-derecha.

De hecho, los ciudadanos que votaron al PSOE en las últimas elecciones generales son las que se muestran más a favor de esta rebaja del IRPF, hasta un 87,8% de ellos la respaldan, frente a un 86,2% de simpatizantes del PP y un 77,5% de los que apoyaron a Vox en las urnas. Tampoco se aprecian diferencias muy significativas por posicionamiento ideológico, el 87,5% de los ciudadanos de centroizquierda creen oportuna esta rebaja, frente a un 84,2% de los de centroderecha, mientras los situados a la izquierda y a la derecha solo guardan una diferencia de ocho puntos porcentuales. 

Sin embargo, otras de sus propuestas como extender la vida útil de las centrales nucleares o eliminar el impuesto a las grandes fortunas resultan menos populares. Menos de la mitad de los ciudadanos (44%) aboga por extender esta fuente de energía que ha suscitado una fuerte controversia en varios países de la Unión Europea, después de que la guerra de Ucrania haya puesto en jaque las cadenas de suministro y diferentes voces hayan visto en la energía nuclear la salida a los chantajes de Vladímir Putin. Mientras que solo un 23,8% apoya la extinción del tributo de solidaridad a las grandes fortunas, que el Gobierno puso en marcha el año pasado.

El Instituto DYM también ha preguntado a los ciudadanos sobre uno de las principales compromisos de Yolanda Díaz, la reducción progresiva de la jornada laboral hasta alcanzar el horizonte de las 32 horas en 2032. La actual ministra de Trabajo ha encontrado en esta propuesta una de las principales vías de movilización del voto, al asegurar que si optan por su papeleta saldrán una hora antes del trabajo en 2024. Este planteamiento es aplaudido por la mayor parte de la ciudadanía y hasta un 76,3% de los españoles afirma estar a favor de esta reducción de la jornada de trabajo, aunque lo cierto es que convence más entre los votantes de la izquierda que en la derecha. 

Hasta un 86,9% de los ciudadanos que votaron al PSOE en las últimas elecciones generales y un 82,3% de los que optan por Unidas Podemos avalan la medida de Sumar, frente a un 60,2% de los votantes que respaldaron al PP y un 59,1% de los que eligieron a Vox.  Los votantes de izquierdas rechazan frontalmente el aumento de las restricciones a la entrada de inmigrantes que plantea Vox, apenas un 22,2% de los votantes de UP apoyan a esta iniciativa, aunque entre los del PSOE esta postura se acerca a la mitad del total (44%). Al tiempo que la mayoría de los que en las últimas elecciones optaron por Vox (70,4%) o el PP (60,8%), se muestran a favor de este endurecimiento de las entradas. 

Esperan que el PP gane las elecciones

Más de la mitad de los ciudadanos, en concreto, el 55,8% cree que el Partido Popular vencerá en las urnas el próximo 23 de julio y que esto le permitirá gobernar con el apoyo de otras formaciones, frente a un 26,7% que defiende que el partido de Pedro Sánchez conseguirá sustentarse en otros partidos políticos para seguir al frente del Gobierno. En esta cuestión, los ciudadanos se dividen de acuerdo al eje izquierda-derecha, de manera que los que optaron por PSOE o UP y se autoubican en el centroizquierda o en la izquierda creen que el PSOE tiene oportunidades de ganar por una pequeña ventaja, mientras que los situados al otro lado del espectro político consideran que Feijóo será el próximo jefe del Ejecutivo.

El instituto señala que la intención de voto al partido de centroderecha se sitúa en el 32,8% en la última semana de precampaña, lo que le daría entre 135 y 138 votos, esto supone una leve caída respecto al 'tracking' anterior, de cuatro décimas porcentuales. En paralelo, un 27,8% de los ciudadanos votarían al partido de Pedro Sánchez, lo que le otorgaría entre 105 y 107 representantes, de manera que perdería seis décimas porcentuales respecto al estudio anterior. Al tiempo que tanto Sumar como Vox mejorarían sus expectativas de voto. La plataforma de Díaz contará contaría con el 13,3% de los votos (31-33 escaños) y la de Abascal con un 15,2% (38-40), de manera que solo la derecha podría reunir los 176 votos necesarios en la investidura.

Los representantes del PSOE y Sumar han dedicado buena parte de la precampaña a alertar sobre los peligros de esta eventual coalición entre Vox y PP, sin embargo, el conjunto de encuestas realizadas entre el 30 de junio y el 2 de julio refleja que la preocupación de la ciudadanía por estas cuestiones es reducida. Además, destaca que la proporción más alta de 'seguro que sí' y 'probablemente sí' apunta a que este gobierno de coalición deterioraría a las relaciones con Cataluña y el País Vasco, mientras que un 40,8% percibe que afectaría a los derechos LGTBI y otro 39,3% considera que afectaría a las medidas actuales contra la violencia de género. No obstante, solo un 20,8% de los encuestados cree que sería un buen gobierno. 

Cae la valoración de Santiago Abascal como líder

El tercer 'tracking' de las generales apenas registra variaciones en la puntuación que reciben los líderes por parte de los ciudadanos. Ninguno de los cuatro principales cabezas de partido consigue el aprobado, pero Feijóo se sitúa en primera posición con una puntuación de 4,1, seguido de Sánchez y Díaz, que empatan a 4, mientras que el líder de Vox pierde dos décimas hasta situarse en el 2,5, siendo, por tanto, el líder peor valorado. 

A pocos días de que los representantes de PP y PSOE se enfrenten en su único 'cara a cara' la valoración de ambos está ajustada, si bien, los ciudadanos prefieren a Sánchez para garantizar el poder adquisitivo de las pensiones, mejorar la sanidad pública y gestionar las relaciones con las comunidades autónomas; al tiempo que eligen a Feijóo para contar con una mayor seguridad jurídica, rebajas fiscales, control del gasto público y transmitir confianza a los inversores.